Cuanto más gruesa sea la pieza, más tiempo puede necesitar en el horno para asegurarse de que se cura completamente. Piezas finas pueden hornearse con menor riesgo de burbujas o grietas, pero deben manipularse con cuidado para evitar roturas después de horneadas. Para las piezas finas sobre azulejo y cubiertas con papel metalizado puedes bajar la temperatura y cocer por más tiempo.